Sagrario Ruiz de Apodaca, amiga de Letizia, en el documental sobre la reina: Le costó renunciar a su libertad
¿Cuál es el papel de una reina en el mundo actual? En torno a esta pregunta gira la nueva serie de documentales de la cadena pública alemana ZDF De profesión: Reina, que abrirá este sábado con un primer episodio centrado en la reina Letizia. “Es la primera periodista en un trono. Una reina moderna que también dice lo que piensa”, resumen sus responsables.
El trabajo de la alemana Julia Melchior, experta en las monarquías europeas, se centra en esta ocasión en la labor de las reinas del siglo XXI. “La reina de España tiene la posibilidad de involucrarse en temas como la salud, la nutrición o la mujer y puede realmente cambiar el mundo. Ese también es el mensaje del documental”, explica a Vanity Fair la directora del documental, que compone un tríptico con otros dos episodios dedicados a Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica.
Refleja a lo largo de 43 minutos cómo doña Letizia está empezando a tener una agenda de temas a los que podrá dotar de continuidad. “No tienen que irse a los cinco años cuando viene el próximo presidente como sucede con las primeras damas. Tienen la posibilidad de cambiar un poco el mundo y es lo que quieren hacer. Hay muy poca gente en la posición de Letizia, Máxima y Matilde”, afirma Melchior, famosa también por ser la encargada de comentar las retransmisiones en directo de las bodas, bautizos y coronaciones reales en ZDF.
El equipo de la televisión alemana siguió a la reina Letizia a lo largo de sus compromisos durante un año, tanto dentro de España como en el extranjero como, por ejemplo, cuando asistió como embajadora especial de la FAO al Día Mundial de la Alimentación, el pasado mes de octubre en Roma, o cuando viajó en una misión humanitaria a Mozambique tras el ciclón Idai, en abril.
Todo ello queda recogido en el documental, al igual que unas imágenes previas al viaje a Mozambique donde se la ve en su despacho preparando la misión con sus asesores. Estas imágenes crearon cierto revuelo en España al extenderse la noticia de que la reina había abierto su oficina por primera vez y lo había hecho a una televisión alemana.
Sin embargo, lejos de lo que se creyó en un primer momento, el equipo alemán no tuvo tratos de favor de ningún tipo. Sí que accedió al despacho de doña Letizia con un cámara, pero no fue el único medio que lo hizo. “Estuve allí, en el despacho. Grabamos las imágenes, pero no fue algo exclusivo. Grabamos junto con otro equipo de la agencia EFE, que fue el que distribuyó sus imágenes a los demás periodistas, pero las que grabamos nosotros son nuestras”, indica sobre lo que califica de “un malentendido”.
El único cierto privilegio que logró Melchior fue que les permitieran grabar desde otro ángulo una vez que la Casa Real entendió que hacían un documental, para lo que necesitaban algunas imágenes diferentes como filmar también a la prensa para mostrar la cantidad de periodistas que acuden a los actos de la reina. También, a diferencia de otros medios, se quedaban más tiempo en los actos para hablar con la gente y entender así el impacto de la reina, como fue el caso de un acto de la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER).
El objetivo era “mostrar otro lado” de la reina. “En los actos ceremoniales de la corona siempre es la protagonista secundaria, saludando al lado del rey“, explica Melchior sobre un hecho que le llevó a pensar lo duro que es “como mujer emancipada quedarte en el papel de consorte. Una consorte en el siglo XXI. No me parece algo contemporáneo”.
El documental, que comienza con imágenes de la pareja tras la coronación saludando desde el balcón del Palacio Real, refleja cómo es para esas mujeres modernas e independientes asumir el papel de consorte. “No lo ven como una limitación, sino como una posibilidad. Ese es también el resultado de los tres documentales”, apunta su directora al mismo tiempo que reconoce la dificultad a la que se enfrentan las reinas al no contar con un gran margen para actuar.
Con ayuda de imágenes de archivo, la autora de otros tres documentales para la ZDF sobre la monarquía española desgrana también el pasado de Letizia y recuerda cómo una niña que soñaba con ser periodista y que llegó a ser presentadora de informativos acabó convirtiéndose en 2004 en la esposa del entonces príncipe de Asturias y posteriormente en reina.
Tanto las imágenes de archivo como las grabadas por la televisión alemana durante todo ese año se entrelazan con el testimonio de gente próxima a la reina o que han trabajado con ella en algún momento, como su amiga Sagrario Ruiz de Apodaca, antigua compañera de doña Letizia en TVE, el historiador Charles Powell, el escritor y Premio Nobel Mario Vargas Llosa, o María Neira, directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que destaca cómo la reina sabe el papel que juega y cómo contribuir con lo que hace.
"El rey fue educado para esto, sobre todo, por su madre, pero la reina Letizia era una mujer trabajadora, que casi de la noche a la mañana llegó a una responsabilidad para la que no había sido preparada. Creo que debió de hacer un esfuerzo considerable. Y creo que está dando sus frutos", señala Vargas Llosa en el documental.
Sagrario Ruiz de Apodaca aporta una de las declaraciones más reveladoras sobre el noviazgo de Letizia y el entonces príncipe Felipe: "Lo único que noté fue que empezó a llegar a la redacción más arreglada, más coqueta. Me acuerdo que me llamó la atención que normalmente llevaba siempre pantalón vaquero, siempre bien, pero muy casual", recuerda Ruiz. "Sin embargo, ese verano la vi con un vestido algo que me sorprendió un poco, pero nada más. No teníamos ni idea que estaba saliendo con el príncipe".
En relación a su labor institucional, Teresa Sanjurjo, directora de la Fundación Princesa de Asturias, apunta: "Su profesión anterior ha marcado su carácter y su visión del mundo".
El filme ofrece una imagen de doña Letizia como una reina perfeccionista y comprometida, a la vez que muestra un perfil más humano de una mujer que sin proceder de la aristocracia acabó siendo reina, pero sin olvidar algún que otro error como el encontronazo con su suegra durante la misa de Pascua de 2018, en Mallorca. “La reina aprendió que los pequeños gestos cuentan”.
El espectador se cuela así en la vida de la reina y la sigue tanto en actos oficiales como la inauguración del curso escolar en un colegio de Oviedo como en un encuentro con su admirado cineasta estadounidense Martin Scorsese con motivo de la ceremonia de entrega de los premios Princesa de Asturias el pasado año. Sin olvidar el lado más privado de la familia real plasmado con ayuda del material cedido por la Zarzuela en el marco del 50 cumpleaños del rey donde se los veía llevando a sus hijas al colegio en coche o comiendo en familia.
Fuente: Leer Artículo Completo