Cayetano Martínez de Irujo, una vida marcada por el maltrato, las drogas y el sexo
Cayetano Martínez de Irujo está en el ojo del huracán. Hoy 4 de septiembre salen a la venta sus memorias ‘De Cayetana a Cayetano’, una polémica biografía en la que el IV duque de Arjona y XVI conde de Salvatierra, cuenta los desvelos que ha sufrido durante su infancia, adolescencia y juventud. Este miércoles, tu revista ‘Diez Minutos’ te ofrece los mejores extractos del libro, publicado por ‘La Esfera de los Libros’, en el que el ex marido de Genoveva Casanova no deja títere con cabeza. En las más de 300 páginas de esta biografía, Cayetano hace confesiones desgarradoras sobre su madre, hermanos, nannies y los problemas que soportó en su juventud con las drogas y el sexo. Empecemos por el principio…
El conde de Salvatierra vivió una infancia muy dura marcada por la temprana muerte de su padre. Esta mala noticia se la dijo su hermano Alfonso y, tras comunicársela, les obligaron a ir a jugar al tenis. «A mi madre le teníamos miedo. Yo me sentía como Oliver Twist dentro de palacio. Iba a pedir comida o una explicación y lo único que recibía eran golpes. A Fernando no le pegaban, sólo a mí, porque él no se rebelaba…», asegura. Cayetano afirma que sus tres hermanos mayores no le quieren y que arregló su relación con su madre antes de que éste falleciera.
Luego llegó la adolescencia complicada de la que intentó huir refugiándose en la noche, el sexo y el alcohol. Con 16 años, tuvo una aventura con una mujer mayor que él y después conquistó a la madre de su familia de acogida en Inglaterra. «También recorrí ese camino: la noche con todas sus aristas, la vibrante y la sórdida. Entré a los 18 y salí a los 23. Me acerqué al mundo de las drogas. Me perturbó por completo la coca. Padecía un problema emocional y era carne de cañón para convertirme en prisionero de algunas sustancias. Era un chico triste, desencantado, sin consejos, sin guía… Vivía obsesionado por conquistar a las mujeres. El sexo se convirtió en mi válvula de escape. Vivía con una obsesión: seducir a mujeres. Ninguna se me resistía. Era una especie de bestia», dice.
El conde de Salvatierra también hace un repaso por las mujeres de su vida y habla de la infanta Elena. «Por puro patriotismo y responsabilidad histórica. La infanta necesitaba una persona fuerte al lado y al parecer yo era el elegido… La relación duró tres meses», cuenta.
Su polémica relación con Mar Flores también tiene hueco en sus memorias. «Conocí a una modelo que me acercó un poco más al lado oscuro. Ella era la horma de mi zapato, en el peor de los sentidos. Yo, que pensaba que todas las mujeres estaban a mi disposición, saboreé mi propia medicina: era una mujer maquiavélica y fría, de doble personalidad», afirma.
Cayetano también desvela algunos detalles de su relación con Genoveva Casanova, la madre de sus hijos, Luis y Amina.«Era un desastre. Le fui infiel a pesar del amor hacia ella. Estuvimos juntos unas tres semanas y después comenzó mi angustia. Durante un vuelo a Madrid le comuniqué mi intención de acabar la relación. Al llegar aquí le confirmaron el embarazo», asegura y añade que ya había dejado embarazadas a otras dos mujeres «pero lo arreglé».
Cayetano también confiesa que, tras años de terapia y tratamientos en Estados Unidos, es un hombre nuevo y está feliz al lado de Bárbara Mirja. «Ahora soy capaz de estar con una mujer y sentirla como compañera. Nuestra relación es magnífica. Nos reímos mucho juntos», asegura.
Fuente: Leer Artículo Completo