Si en 2015 te entregaste a los mocasines de pelito, en 2019 morirás por los de borreguito
La primera vez que los vimos no supimos qué pensar. Demasiada información en un par de mocasines tuneados. La propuesta la lanzaba Alessandro Michele en su primera colección para Gucci, y la transformación de los clásicos Jordaan de piel, con la mítica hebilla dorada Horsebit en el empeine, en otros con la misma base pero rompedores de esquemas gracias al pelito que tenían en la plantilla, era algo osado y complejo a partes iguales. Arriesgar o morir. Darlo todo en un primer embite y esperar resultados. La apuesta de Michele funcionó y las damas de la moda se lanzaron sin pensárselo mucho a las frías calles de invierno sin calcetines pero con los zapatos más calentitos que nunca. Sus mocasines con pelo darían la vuelta al mundo calzando todos los pensadísimos looks de los street style, y mientras algunas seguían sin entender la revolución que el diseñador acababa de comenzar en la casa italiana, Gucci se apuntaba un tanto con su propuesta.
© Getty Images
La proeza del diseñador italiano no se quedó en una anécdota con fecha de caducidad, todo lo contrario. Si hace cuatro años tú también te quedaste prendada de su idea, a priori loca, en realidad, genial, el paso que ha dado Sebago para modificar sus también clásicos mocasines negros de vestir de toda la vida te seducirá al mismo nivel: ¿borreguito en su interior? Sí, y no existe nada más cómodo, mullido y calententito que este tipo de pelo en los cortos y fríos días de invierno.
© Cortesía Sebago
La transformación la han experimentado los míticos Dan, los mocasines de corte masculino que seguro que ha llevado tu padre en algún momento de su vida y que tú querrás copiarle hoy después del giro que acaban de experimentar. Hechos con cuero natural y cosidos a mano para aguantar con dignidad (y mucha calidad) el paso del tiempo, la firma les ha añadido un forro de pelo de oveja en su interior y en parte de su exterior con un resultado llamativo y sorprendente a partes iguales. Clásicos sí, pero modernos a más no poder.
© Cortesía Sebago
Disponibles en varios modelos, unos más tipo mule (220 euros), con la parte de atrás más baja, y el borreguito en color blanco, y otros completamente cerrados (190 euros) y con el pelo en marrón, están todavía llegando a las tiendas con cuentagotas y ni siquiera están en la web, pero honestamente, nos morimos de ganas por tenerlos.
Tendencia en otoño de 2019 y seguramente en 2029, los clásicos no mueren, a lo sumo se transforman.
Fuente: Leer Artículo Completo