‘Inocentes’: qué ha pasado en el capítulo 8 de la serie turca
- Qué está pasando en ‘Inocentes’: la mujer se enfrenta a la voz de su madre en su cabeza y se plantea darse una oportunidad con Naci, pero la revelación de un secreto podría cambiarlo todo.
- Qué ha pasado en el último capítulo de ‘Inocentes’
Gülru, la esposa de Naci se presentó en su hotel para reclamarle por haberla abandonado a ella y a su hija Tormis. El maestro haciendo caso de las súplicas de su mujer se reencontró con su pequeña y le promete que iría a visitarla más a menudo: “No voy a dejarte sola de nuevo”.
Cuando regresó a su habitación, vio que Safiye le dejó una nota pidiéndole que no se fuera. Él le contestó con otra misiva en la que le rogó verse al día siguiente a las 4 de la tarde en una de las plantas de su edificio. Safiye recibió la carta e ilusionada y se preparó para su cita. Se arregló su cabello y eligió una ropa bonita y colorida para reencontrarse con el amor de su vida. Su cambio de actitud agradó a su familia, concretamente a Neriman y a Gülben, que estaban felices por su hermana. Después de mucho tiempo, la ven sonreír.
Por su parte, Inci no soportó que su hermano y su abuelo hubieran traído a su padre a vivir a la casa que comparten. Destrozada, se marchó con Han a pasar la noche con él en el pequeño apartamento acristalado que construyó para ella en la azotea. Mientras, Gülben le pidió a Bayram que le comprara una televisión. Quería modernizar la casa.
La boda de Han e Inci, al descubierto
La mañana de después, Ege hizo frente a Emre y otros compañeros de la escuela cuando se rieron de Neriman y sus manos enrojecidas. Esto hizo que la chica se frotara aún más los dedos, tratando de evitar la ansiedad que le genera ser el centro de atención de su colegio. Ege, co ayuda de su hermana, logró que Neriman escuchara sus consejos para tratar su tic nervioso e, incluso, le regaló una crema hidratante entre sonrisas.
Al caer la tarde, Naci y Safiye tuvieron su deseada cita. Durante la bonita velada, ella le reveló que nunca volvió a amar a nadie después de que se fuera y él le contó lo mismo: “Jamás pude olvidarte, ni un solo día de mi vida”. Cuando terminaron su té, ambos quedaron en verse en otra ocasión y el maestro regresó a su hotel.
Ahí se encontró con su hija, quien se escapó de su casa para ir a verle. La niña viendo que su padre se negó a volver con ella y con su madre, salió del cuarto sin que él se diera cuenta. El destino hizo que se metiera en el edificio de los Derenoğlu. Safiye la vio subir hacia la azotea y sin imaginar quien era, la siguió pare evitar que se hiciera daño. La sorpresa de la mujer fue inmensa cuando en la terraza vio ante ella el pequeño cuarto acristalado que Han le hizo a Inci y dentro de él, las fotos de su boda. “Se han casado”, susurró sin poder creérselo.
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